
Sabemos que nuestro país ha pasado por una gran desintegración y debemos unirnos en oración por nuestros hermanos chilenos que han perdido sus seres queridos, así como sus hogares. No podemos olvidar que por detrás de todo lo que es fenómeno está siempre presente la Imagen Verdadera:
“Este mundo es una manifestación de las infinitas gracias de Dios. Dios es invisible. Seres y cosas que son visibles, que pueden ser tocados y que emiten sonidos u olor son apenas existencia fenoménica transitoria y no existen de verdad. En el mundo natural parece que la fuerza de los elementos destruye el orden y crea el caos. Los huracanes derrumban los árboles, las tempestades de arena hacen avanzar el desierto, los incendios forestales destruyen la vegetación, los tsunamis invaden y destruyen las tierras del litoral. Todos estos fenómenos parecen exclusivamente destructivos. Pero lo que parece destrucción contribuye para el surgimiento de ambientes peculiares: brotan nuevas especies de plantas, se amplía el sistema ecológico de las regiones arenosas, surgen vegetaciones que se encontraban “latentes” y los nutrientes contenidos en las aguas del mar benefician a varios seres vivos. Las aguasLa vida es orientada por el amor y la sabiduría y, contrariando la ley física que admite que el orden tiende para el desorden, hace surgir un admirable orden en medio de la enorme diversidad de seres vivos y hasta hoy ese orden es mantenido. Debemos "visualizar", por detrás de esto, la infinita gracia de Dios. En vez de buscar a Dios en algunos fenómenos aislados, debemos meditar sobre el hecho de que todo es sustentado por la fuerza vivificadora, por la sabiduría vivificadora y por el amor vivificador, que actúan por detrás de los innumerables fenómenos. El aspecto fenoménico es transitorio y en él se repiten alternadamente destrucciones y reconstrucciones. Pero la Imagen Verdadera, que existe por detrás del aspecto fenoménico es repleta de infinita sabiduría, amor y belleza y perdura eternamente. Esa es la Gran Vida y como hijos de Dios contemplemos y agradezcamos la presencia de Dios en las obras de la Naturaleza del mundo fenoménico. Muchas gracias".
Del libro "Oraciones Diarias" del Profesor Masanobu Taniguchi.
Del libro "Oraciones Diarias" del Profesor Masanobu Taniguchi.